La
tendinitis es la inflamación de un tendón (banda de tejido conectivo denso que normalmente conecta el músculo con el hueso). Es sobre todo frecuente en el tendón de Aquiles y el tendón bicipital. La tendinitis aquílea produce dolor en el talón, y a menudo el tendón aumenta de calibre y la piel suprayacente se inflama.
Causas
Ciertos tipos de tendinitis suelen producirse por sobreuso, haciendo
movimientos repetitivos continuamente sin una debida postura, o en el
caso de la tendinitis aquílea, agravada por la presión del calzado. Con
frecuencia se debe a disminución de la vascularización de los tendones
en personas de edad adulta. Los esguinces,
ejercicios inhabituales y los microtraumatismos repetidos con
suficiente intensidad para ocasionar lesiones sin rupturas son también
predisponentes a una futura tendinitis.
Manifestaciones clínicas
El síntoma más frecuente de la tendinitis bicipital es el dolor local en el sitio de inserción de la porción larga del bíceps a nivel del codo. Puede provocarse el dolor impidiendo al paciente que flexione el brazo
contra resistencia. Este tipo de tendinitis aparece tras un esfuerzo
prolongado (trastorno conocido como lesión por sobrecarga).
Tratamiento
El tratamiento consiste en el reposo (a veces mediante férulas o inmovilizaciones), y en ocasiones infiltraciones con corticoide. A veces es necesario modificar el calzado: algunas zapatillas deportivas, que pretenden proteger el tendón
de Aquiles, son en ocasiones la paradójica causa del problema. La
tendinitis, en casos de dolor persistente, necesita ser operada por un
traumatólogo. En caso de que el tendón presente calcificaciones, su
tratamiento puede combinarse eficazmente con ondas de choque.
Prevención
- Evitar movimientos repetitivos y el uso excesivo de una extremidad.
- Realizar ejercicios de calentamiento lentos antes de una actividad agotadora.
- Mantener todos los músculos fuertes y flexibles
No hay comentarios:
Publicar un comentario